Retomando la entrada anterior Llegó el día, rompí aguas… una vez se llevaron a la peque a hacer el piel con piel con su padre, a mi me llevaron a reanimación hasta que se pasara el efecto de la epidural, me tuvieron tres horas, que tres horas mas largas por Dios… sólo quería estar con mi pequeña, estaba tranquila porque sabía que estaba con su papá, que pena no poder vivir ese primer momento de contacto con ellos, al final fue un momento sólo de ellos dos, y eso también me encanta.

Después de tres horas me llevaron a la habitación, allí estaba en el sillón mi marido todo emocionado con los ojos hinchados y mi bebé sobre su regazo desnudo, también estaban mis suegros y mis padres.

Estaba muy sensible, susceptible, cansada, sólo quería tener a mi bebé en mis brazos y descansar, pero todavía no era momento de descansar, había que empezar con la lactancia, ya habían pasado mas de tres horas desde que había nacido y tenía que ponérmela al pecho lo antes posible.a

Tuve claro desde que me quedé embarazada que quería darle el pecho a mi bebé, por lo menos los primeros 6 meses de vida, luego ya veríamos (actualmente llevo 15 meses de una exitosa lactancia), aunque siempre decía le daré si puedo, le daré si tengo leche, le daré si mi leche le alimenta (todos esos pájaros malos que nos mete la gente en la cabeza, sin conocimiento ninguno, que no saben el daño que pueden hacer a las futuras mamas por falta de información y encima mala información, ya os hablaré en otra entrada de falsos mitos de la lactancia) bueno que me voy por las ramas…

Como os comentaba debido a la mala información y los bulos, cansada de escuchar que con la cesárea era muy difícil dar el pecho, eso me frustraba mas, a parte de mi cansancio, porque era como que yo quería pero sabia que no iba a poder (que equivocada estabas Paola jeje)

La enfermera me dijo que le habían dado un biberón y que si quería darle pecho tenía que empezar cuanto antes, así que llegó ese momento, en el que me la tuve que poner al pecho, yo no sabía ni como tenía que coger el pezón, ni como tenía que poner la mano, ni como colocar bien al bebé, ni nada de nada, en el Hospital de Elda (Alicante) tienen a unas pedazo de profesionales amantes de su trabajo que me ayudaron muchísimo y allí empezó toda la verdadera y buena información sobre la lactancia, pero el camino de rosas no creáis que empezó enseguida, mi bebé no se agarraba debido a que tenia lo que se conoce como pezón plano, cada vez que lo intentaba no lo conseguía y cada vez me frustraba mas, me traían jeringuillas con leche para engañarla, se lo ponía primero y cuando empezaba a salir la leche la ponía al pecho, pero nada de nada, no había agarre por su parte debido a mi pezón.

Recuerdo esa primera noche, fue horrible, estaba desmotivada, quería tirar la toalla, quería pedir un biberón, no quería sufrir y no quería que mi bebé pasara hambre, sólo quería poder descansar y que mi bebé estuviera bien alimentado.

Al día siguiente viendo las enfermeras que a mi bebé le costaba tanto agarrarse me ofrecieron una pezonera (pinchando en pezonera os dejo un enlace dónde os explican que son, para que y porque se utilizan) eso fue mi salvación, fue ponérmela y agarrarse, y empezar a notar como mi bebé si se podía alimentar de mi, aunque al comienzo de la succión era molesto no me importaba por fin mi bebé y yo eramos uno, por fin podía alimentar de mi leche a mi bebé eso que tanto deseaba.

La subida de la leche se produjo al tercer día. Los pechos se pusieron muy duros y debo decir que tuve algunas sensaciones molestas, pero con la ayuda del personal del hospital en donde dí a luz, logré que antes de salir del hospital mi bebé se alimentara exclusivamente de leche materna.

Debo decir que ella nació baja de peso porque la cesárea se realizó por urgencias en la semana 38. Como es normal, durante los primeros días perdió un poco de peso, pero al cabo de una semana ya había sobrepasado con creces su peso inicial, así que puedo afirmar que la lactancia materna exclusiva después de una cesárea es posible, tanto como si de un parto normal se tratase.

Os recomiendo que os informéis, que leáis mucho sobre el tema, que habléis con otras madres que hayan dado el pecho, (Yo siempre estaré eternamente agradecida a mi amiga Lourdes, que fue mi mayor consejera y mayor apoyo en la lactancia, ya os hablaré en la próxima entrada de ella y de todo lo que me enseñó) de esa manera estaréis preparadas (por lo menos en cuanto a la teoría), para afrontar cualquier problema que se os pueda presentar.

Desde aquí os animo a todas aquellas embarazadas a que hagáis oídos sordos a quienes pretenden desanimaros en el tema de la lactancia (seguramente la gente lo hace sin querer). Ni la cesárea, ni un parto prematuro, ni que te separen de tu bebé es un condicionante para tener una lactancia exitosa.

Hasta muy pronto chicas, deciros que si os ha gustado mi entrada, darle a me gusta, compartir y seguirme en mi blog para que os enteréis de todo las primeras.

*Próxima entrada, llegada a casa y primeras experiencias y dudas con la lactancia materna.